Agradecemos a los Comités sobre Educación y Contratos del Concejo de la Ciudad de Nueva York por llevar a cabo, de manera conjunta, esta importante audiencia en referencia a los servicios de transporte en autobuses escolares. Mi nombre es Ruth DiRoma y soy educadora familiar sénior en INCLUDEnyc, la cual es la principal fuente de capacitación e información para personas de hasta 26 años de edad que tienen o se sospecha que tienen una discapacidad, y para sus padres y los profesionales que les brindan apoyo. Además, ayuda a las familias de la ciudad de Nueva York a explorar los sistemas complejos de soporte y servicios de educación especial desde hace más de 40 años.
Este año escolar tenemos las mismas dificultades en el trasporte escolar que en años anteriores: problemas de rutas, la rotación y la falta de empleados, horarios restrictivos y la falta de transporte escolar después de la escuela y durante el verano, así como muchos otros obstáculos sistemáticos vinculados con este servicio.
Las familias se comunican con nuestra Línea de Ayuda porque buscan asistencia para resolver los problemas de transporte de sus hijos debido a la falta de pasos oportunos y claramente delineados para los procesos y procedimientos de escalamiento de las escuelas y de las Escuelas Públicas de Nueva York (NYCPS, por sus siglas en inglés). En consecuencia, cada año miles de estudiantes con discapacidades, y posiblemente decenas de miles que reciben servicios de educación especial, se ven privados de recibir instrucción especializada y los servicios relacionados que les corresponden de manera adecuada, y de asistir a los programas de manera constante y plena.
Los estudiantes con discapacidades no deberían verse perjudicados, tanto a nivel educativo como socioemocional, debido a las deficiencias y fallas del sistema de transporte mientras que las empresas de autobuses extienden sus contratos sin realizar ningún tipo de mejora en los servicios que brindan. Cabe destacar, además, que el principal contrato de transporte escolar de la ciudad sigue vigente, casi 45 años después de que se firmara por primera vez. Desde 1979, cuando ocurrió la primera huelga de autobuses escolares, estos contratos se han prorrogado año tras año en lugar de abrir nuevas licitaciones. Esto no debería seguir ocurriendo, ya que la firma de nuevos contratos permitiría mejorar el servicio y las métricas de responsabilidad. Con nuevos contratos y cambios en las políticas de admisión, los estudiantes con discapacidades podrían integrarse mejor con los estudiantes de educación general, tal como lo previo la Corte Suprema de los EE. UU. hace más de medio siglo, en su decisión de 1971, que permitió el uso del transporte escolar como herramienta de integración social.
También apoyamos la adopción de la propuesta de legislación local 0515-2024 por parte del Concejo, que exige al Departamento de Educación (DOE) informar sobre los servicios de transporte escolar y su personal. Una mayor transparencia no solo podría mejorar la calidad del servicio ofrecido por las empresas de autobuses, sino que además ayudaría a generar confianza con las familias, en un área que necesita soluciones desde hace mucho tiempo.
Por otra parte, instamos a la ciudad a asignar recursos para mejorar la app de autobuses dirigida a los padres y financiar una campaña de participación pública, ya que muchos padres ni siquiera saben que esta herramienta existe. Además, si bien la app les permite a los padres conocer la ubicación del autobús de sus hijos, no informa sobre la hora exacta de llegada a la escuela por las mañanas ni sobre el momento en que los estudiantes suben al autobús al final del día. De hecho, sabemos que varios estudiantes permanecen mucho tiempo en los autobuses sin ir a ninguna parte, tanto al comienzo como al final de la jornada escolar, lo cual es algo inaceptable si se tiene en cuenta que hay estudiantes de diferentes escuelas con horarios completamente distintos.
También recomendamos que las escuelas públicas de la ciudad de Nueva York y la ciudad tomen las siguientes medidas:
- Presionar a la legislatura estatal en la próxima sesión para modificar la Sección 14 del Artículo 305 de la Ley de Educación del Estado de Nueva York, la cual establece que los contratos de transporte escolar deben adjudicarse al licitador responsable con la oferta más baja, puesto que esto le permitiría a la ciudad tener mayor control sobre la calidad y la prestación de los servicios.
- Realizar una nueva licitación de los contratos de transporte escolar antes del 1 de julio de 2025.
- Actualizar la Regulación A-801 del Canciller sobre transporte escolar antes de que finalice el presente año lectivo, ya que no se ha revisado en 24 años.
- Establecer la obligatoriedad de las capacitaciones anuales sobre personas jóvenes con discapacidades para todo el personal de transporte escolar de la ciudad de Nueva York, y garantizar que dichas capacitaciones sean presentadas por profesionales con experiencia en el área, no por las empresas de transporte.
- Exigir que para cada campus haya una sola ruta de transporte.
- Separar a los estudiantes según su edad cronológica para que quienes asisten a la escuela primaria ya no compartan el autobús con los estudiantes de hasta 21 años.
- Desarrollar una herramienta pública adicional de rendición de cuentas que evalúe la puntualidad de las rutas escolares desde una perspectiva centrada en los estudiantes y no en las empresas de autobuses.
- Asignar los recursos necesarios para una campaña de concientización pública a largo plazo sobre la app Via.
Agradecemos su atención a estos temas tan importantes y esperamos colaborar con ustedes para mejorar la equidad y el acceso de todos los estudiantes con discapacidades en la ciudad de Nueva York.
Atentamente,
Ruth DiRoma
Educadora familiar sénior